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No es un mago ni tampoco un arquero. Dispara una flecha mágica que atraviesa y daña a los enemigos que se interponen en su camino. No es ningún truco, ¡es magia!
Invoca esqueletos y dispara rayos destructores. Por desgracia, sus brillantes ojos de color rosa no disparan rayos láser.
"Al ser destruido, se divide en dos golemitas de elixir,que,al ser destruuidos, se dividen en dos pegotes de elixir. !Cuando tu rival acabe con un pegote, recibira una gota de elixir"
¡Libera a un trío de pillos de lo más travieso! El chico toma la delantera, mientras que las chicas acribillan a los enemigos desde la retaguardia ¡lanzando bolas de chicle con sus tirachinas!